Estrategias de enseñanza y herramientas de seguimiento en el aula

Las estrategias favorecen la enseñanza y el aprendizaje a través de la participación activa de todos los actores que intervienen en el proceso. Al ampliar las experiencias de aprendizaje mediante el uso efectivo de las herramientas que proveen las estrategias, podemos atender las necesidades de aprendizaje particulares, así como fortalecer las capacidades de todos los estudiantes evitando estigmatizar o señalar.

FORTALEZA
El contar con una serie de estrategias y herramientas de seguimiento basados en evidencia es una fortaleza en este proceso, ya que al ser combinadas y adaptadas por el docente podemos desarrollar diferentes habilidades en los estudiantes con el propósito de que el Aprendizaje de Todos sea sostenible, perdurable, saludable y duradero. 

BARRERA
Resulta necesario combinar la habilidad y voluntad del docente y el estudiante ya que las oportunidades de aprendizaje por si solas no generan aprendizaje, además se requiere un equilibrio entre las estrategias de enseñanza y las de aprendizaje, puesto que en la interacción docente-estudiante algunas son predecibles mientras que otras resultan de manera espontánea. 

OPORTUNIDAD
El uso riguroso y bien planeado que se haga de las estrategias, facilita el cambio de mentalidad del docente dirigiéndose al cumplimiento de estos tres principios: 
1. Centrarse en lo que se enseña y cómo se enseña, en lugar de quién va a aprender. 
2. Centrarse en reconocer las capacidades de los estudiantes como base del proceso de enseñanza–aprendizaje. 
3. Centrarse en el compromiso con el desarrollo profesional continuo como una manera de contribuir al desarrollo de las prácticas inclusivas. 

Finalmente, es importante mencionar que el docente responsivo organiza estratégicamente oportunidades de aprendizaje para que esto suceda, basándose en lo que sabe acerca de las capacidades de aprendizaje, intereses, necesidades y respuestas de sus estudiantes frente al proceso de enseñanza.